PITIRIASIS ROSADA DE GIBERT
La pitiriasis rosada de Gibert es una erupción cutánea no contagiosa que aparece, especialmente en primavera y otoño, en adolescentes y adultos jóvenes. Aunque sus causas no están plenamente identificadas, se cree que puede estar ocasionada por un virus de la familia del herpes simple.
Síntomas de la pitiriasis rosada de Gibert
En su etapa inicial, la afección presenta una lesión única de notable tamaño, generalmente en el tronco, de forma ovalada, eritematosa y con superficie escamosa, conocida como placa heráldica. Un par de semanas después aparecen múltiples máculo-pápulas eritematoescamosas, distribuidas de forma simétrica en tronco y raíces de las extremidades. En ocasiones pueden producir picazón.
Diagnóstico y tratamiento
Al ser una enfermedad autolimitada, la pitiriasis rosada de Gibert suele resolverse de forma espontánea a las seis y ocho semanas. Sin embargo, síntomas similares pueden ser atribuidos a afecciones más peligrosas, por lo que siempre conviene acudir a la consulta de un dermatólogo.
“Debe realizarse el diagnostico diferencial de la placa heráldica con un eccema numular o una tiña corporis; y en el caso de la erupción maculopapular, debe diferenciarse de la roséola sifilítica o la psoriasis en gotas.”
Por otro lado, el dermatólogo siempre puede ayudar a acelerar el proceso y recomendar soluciones o prácticas como el uso de antihistamínicos orales, corticoides tópicos o lociones que alivien el picor, o la exposición moderada al sol o a luz ultravioleta.
Una vez superada la enfermedad, con el paso de los años.”
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